¿Biblia… o biblia…? ¿Cuando cada cual?

Rastreando páginas en busca de noticias sobre la Biblia me encuentro la palabra “biblia” escritas unas veces con mayúscula inicial, y otras con todas las letras en minúsculas. Claro, hay razones gramaticales para justificar ambas posibilidades, pero la realidad es que en muchas ocasiones encuentro ambos términos utilizados incorrectamente. Es por eso que me ha parecido oportuno dedicar un pequeño artículo para aclarar esta cuestión.

El equívoco proviene de que se usa la misma palabra para expresar dos cosas diferentes: el contenido, y el continente.

En el primer caso hacemos referencia a algo único: el mensaje de la Biblia (el contenido), por tanto, se debe usa la palabra “Biblia” (con mayúscula), como un nombre propio.
     Ejemplos: “La Biblia es la Palabra de Dios”. “La Biblia es lo más hermoso que se ha escrito”. “Sin la Biblia, la humanidad estaría perdida”.

En el segundo caso, cuando nos referimos a los continentes, los libros concretos que contienen ese mensaje (que aunque único está repetido en infinidad de soportes) debemos usa la palabra “biblia”, sin mayúsculas. En este caso hacemos referencia a individuos de una colectividad: existen infinidad de soportes en los que está registrado el único mensaje de la Biblia.
     Ejemplos: “Le he regalado una biblia de letras grandes a mi abuelo”. “En Irán han detenido a un misionero con un alijo de biblias”. “En mi casa tengo una biblia en cada habitación”.

Hace pocos meses se estrenó una película que ilustra muy bien ambos usos del vocablo “biblia”:  “El libro de Eli”.

En síntesis, la historia trata sobre un hombre que tras una devastación apocalíptica de la civilización camina hacia el oeste cargando una biblia (en minúsculas).

Aunque es la última existente, no deja de ser un ejemplar más de todo el conjunto de libros que a lo largo de la historia han recogido “La palabra de Dios”; por eso debe escribirse en minúsculas.

En cambio, el mensaje contenido en ese último libro (que al final también se malogra) sólo es uno, eterno e indestructible por inmaterial. Por eso Eli pudo restablecerlo para la futura humanidad, cosa que le vemos haciendo en el fotograma que ilustra el texto.

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