Entrenador Markarian convoca campaña de valores a través de la lectura de la Biblia

Sergio Markarián no descansa desde que llegó al Perú con el encargo de dirigir la Selección Nacional de Fútbol. Pero hizo un paréntesis para recibir a la delegación de la Sociedad Bíblica Peruana que le entregó una Biblia del Siglo de Oro, un carnet de Socio Honorario, el libro “La Biblia en la Historia del Perú” y diversos materiales bíblicos que se han producido en nuestro medio. Cristiano de muchos años el profesor Markarián ha sido directivo de la Sociedad Bíblica Uruguaya y vive en medio de dos grandes pasiones: el fútbol y la Biblia.

“El Mago”, como cariñosamente es llamado, encarna las esperanzas de la hinchada peruana para llegar a torneos importantes como la Copa América 2011 y la Copa Mundial de 2014 y, aunque el fútbol es su pasión desde hace décadas, no cesa de repetir que “es finalmente un deporte, yo lo tengo muy claro, no hay que dramatizar. Dramático es el hambre, la injusticia, las calamidades humanas, la miseria. Eso es dramático. Lo que pasa es que el fútbol es un producto y pues hay que venderlo. Menudo compromiso me agarro aquí, tengo que llevar 22 jugadores al mundial y hasta 3 árbitros, que si no clasificamos no van”.

EL MANUAL DEL MAGO

Sergio Markarián es de origen armenio, la primera nación en aceptar el cristianismo y que sufrió un terrible genocidio a principios del siglo XX. “Esa tragedia obligó a mi abuelo a migrar a América Latina. Aquí conocí el catolicismo y más adelante acepté a Jesús en una iglesia evangélica. He conocido muchas iglesias por los viajes que he tenido que hacer, desde hace décadas solo pasó un mes al año en mi país, el resto en otros lugares. Al comienzo asistí a una iglesia metodista y ahora lo hago en una bautista que es donde van mis hijos. Pero lo más importante no es la denominación cristiana a la que uno asiste sino cuánto de ello se lleva en el corazón, yo puedo sentir más hermano a un buen católico que a un mal evangélico”, nos dice con un tono marcado por la experiencia.

“La Biblia es la Palabra de Dios y el manual de la vida. Si tenemos alguna duda respecto a la fe, abrámosla para leer proverbios y salmos, sin duda sus consejos nos van a guiar y nos van a acercar a conocer a Jesús. Los evangelios son el relato de la más increíble historia que existe, la historia de Jesús. Y tener a Jesús en el corazón nos fortalece, nos anima, nos da fuerzas para seguir. Mi trabajo depende de resultados y aunque Dios no juega al fútbol me hace tener el amor que es lo principal para transmitirlo a mis dirigidos. Por eso trato de leer una hora al día la Palabra de Dios”.

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